Lección 02 El peligro de crecer sin madurez
Discipulado # 2
El peligro de crecer sin madurez
“ Oíd cielos escuchad tierra, porque YHWH habla crie hijos y los engrandecí y se rebelaron contra mí “. Isaías 1:2
El profeta Isaías aquí le estaba hablando a un pueblo y a sus gobernantes que se había enaltecido y se habían rebelado contra Dios.
Aquí el pueblo de Dios en esta época está siendo conducido por el rey Uzías, un rey que según 2 Crónica 26, había empezado bien a reinar pero su corazón se enorgulleció y se vanaglorio, entrando rebeldía en él y allí fue su ruina.
“ Mas cuando ya era fuerte, su corazón se enalteció para su ruina; porque se rebeló contra Jehová su Dios, entrando en el templo de Jehová para quemar incienso en el altar del incienso ”. 2 Crónicas 26:16
La falta de madurez en tu vida, como esposo, esposa, hijo o ministerio hace que tu corazón se enaltezca haciéndote pensar que eres el mejor, que eres conocido por tus fuerzas y no porque Dios te levantó. Nuestra ruina viene cuando pensamos que somos el centro del universo y que sin nosotros las cosas no salen bien.
El ego de Uzías a causa de su inmadurez le hizo pensar que, si tomaba el lugar del sacerdote al quemar incienso en el altar de Dios, no pasaría nada porque él estaba muy alto para que los sacerdotes le corrigieran.
Esto nos hace pensar que, tener una posición no significa que seamos maduros. Él era rey pero cometió un error. Eso lo podemos ver en aquellos que, siendo usados por Dios piensan que ya no se les puede corregir, ni aconsejar, ni guiar.
La falta de madurez te hace pensar que si no eres tú el que cantas o predicas en el altar, Dios no se mueve.
La inmadurez hace que te sientas tan alto que no aceptas consejo ni amonestación de nadie.
Los sacerdotes aconsejaron aquí al rey Uzías que no lo hiciera, pero su ego y su corazón enaltecido no les dejo escuchar el consejo que lo salvaría de su ruina. El inmaduro nunca aceptará consejo, ni que está mal, por eso la palabra dice en Jeremías 4:22 “porque mi pueblo es necio no me conocieron son hijos ignorantes y no son entendidos sabios para hacer el mal, pero para hacer el bien no lo entendieron.”
Uzías fue un ejemplo de alguien sabio en su propia opinión y por tal razón no comenzó como terminó y su fin fue desastroso. Proverbios 3:7
Nosotros debemos vernos en ese mismo espejo y creernos que sin Dios podemos hacer las cosas cuando eso no es así.
A veces por nuestra inmadurez no podemos ver más allá y pensamos que por hacer ciertas cosas o tomar ciertas atribuciones que no nos corresponden, no habrá consecuencias, cuando la realidad es que en cada paso que damos en desobediencia trae nefastos resultados.
Características de las personas inmaduras.
1. El inmaduro quebranta el orden establecido por Dios. 2 Crónicas 26:18
2. El inmaduro toma posiciones que no le corresponde y no fue llamado por Dios para ejercerlo. 2 Crónicas 26:18
3. El inmaduro no termina nada de lo que comienza. 2 Crónicas 26:21
Con la historia de este rey vemos el peligro de estar en posiciones de poder con inmadurez en el corazón. Este rey se enfrentó con grandes ejércitos, pero no fue vencido por sus enemigos si no por su inmadurez.
Uzías fue un gran reformador un guerrero fiero mientras se mantuvo fiel a Dios. Hubiese podido mantener toda una vida de victoria si se hubiese mantenido enfocado en Dios.
La inmadurez hace que quitemos nuestra mirada en Dios.
Dios no perdonó en Uzías la falta de obediencia, cuando quiso quemar incienso los sacerdotes le dijeron que no lo hiciera y por cuanto desobedeció le cayó lepra.
¿Sabes cuantos ministros, sacerdotes, lideres hay en la iglesia por levantarse contra Dios y la cabeza que Dios ha puesto sobre la congregación?
Uno de los problemas más grande que tiene la iglesia no es el diablo son los creyentes inmaduros.
Una iglesia grande no es la que ha crecido en número, sino en madurez.
Pst. F. Tranfa