Soy miembro de la familia de Dios
Universidad de la Fe
Campus Madrid -Discipulado
SOY MIEMBRO DE LA FAMILIA DE DIOS
INTRODUCCIÓN:
Dios hizo a la Iglesia como el hogar para todos los que nacen del Espíritu., Al recibir a Jesús, naciste espiritualmente. A y así como un niño, cuando nace en el seno de una familia,
recibe amor, cuidado, alimentación y educación; Así el propósito de Dios es que nazcas espiritualmente en el seno de una familia espiritual, o iglesia, en que puedas crecer y
desarrollarte espiritualmente. Es por esto necesario que te congregues en una iglesia local.
LA IGLESIA ES NUESTRA FAMILIA ESPIRITUAL
• Familia de Dios
Ahora eres miembro de la familia de Dios. Ya no eres un extraño “Por eso, ya no sois extranjeros ni forasteros, sino conciudadanos de los santos y miembros de la
familia de Dios” (Efesios 2:19). Ya no eres enemigo “También a vosotros, que erais en otro tiempo extraños y enemigos por vuestros pensamientos y por vuestras
malas obras, ahora os ha reconciliado” (Colosenses 1:21).
La iglesia es llamada la familia de Dios porque tenemos un mismo Padre “Un solo Dios y Padre de todos, el cual es sobre todos y por todos y en todos” (Efesios 4:6).
• Familia de la fe
“Así que, según tengamos oportunidad, hagamos bien a todos, y especialmente a los de la familia de la fe” (Gálatas 6:10).
La iglesia es llamada la familia de la fe porque tenemos “Un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo” (Efesios 4:5).
¿POR QUÉ SER PARTE DE UNA IGLESIA LOCAL?
Tienes ahora una familia muy grande alrededor del mundo, pero tu familia más cercana es tu iglesia local.
Es importante que te congregues para que crezcas espiritualmente. El mandamiento de Dios es que crezcas en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor Jesucristo “Antes bien,
creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A él sea gloria ahora y hasta el día de la eternidad” (2 Pedro 3:18).
Es importante congregarse porque la iglesia asume ahora la responsabilidad de cada miembro para ayudarle en su crecimiento espiritual.
• La iglesia asume la responsabilidad de enseñarte todo lo que el Señor nos ha mandado
“Y enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado. Y yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo” (Mateo 28:20).
Una enseñanza sana y sistemática “Y desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación” (1 Pedro 2:2).
Esto se refiere a la enseñanza básica para los recién convertidos. Es tan importante una buena enseñanza porque hay muchos falsos maestros con falsas enseñanzas.
Otros dos textos en que se menciona la leche nos muestran la importancia de una buena enseñanza en los comienzos de la vida cristiana “Os di a beber leche, no
alimento sólido, porque aún no erais capaces; ni sois capaces todavía” (1 Corintios 3:2)
“Debiendo ser ya maestros después de tanto tiempo, tenéis necesidad de que se os vuelva a enseñar cuáles son los primeros rudimentos de las palabras de Dios; y
habéis llegado a ser tales, que tenéis necesidad de leche y no de alimento sólido.
Y todo aquel que participa de la leche es inexperto en la palabra de justicia, porque es niño” (Hebreos 5:12,13).
• La iglesia asume la responsabilidad de cuidarte “Apacentad la grey de Dios que está entre vosotros, cuidando de ella, no por fuerza, sino voluntariamente; no por
ganancia deshonesta, sino con ánimo pronto; no como teniendo señorío sobre los que están a vuestro cuidado, sino siendo ejemplos de la grey” (1 Pedro 5:2,3).
• La iglesia asume la responsabilidad de darte todo el amor que requieres para que tengas el mejor desarrollo espiritual “En esto hemos conocido el amor, en que él
puso su vida por nosotros; también nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos” (1 Juan 3:16).
EL EJEMPLO DE LA IGLESIA PRIMITIVA
El mejor ejemplo lo tenemos en la historia registrada de la primera iglesia en Hechos 2:41-47. Veamos a través de este ejemplo los pasos que debes dar para hacerte miembro de
la iglesia local:
• Recibieron la palabra. Al recibir a Jesús ya diste este primer paso.
• Fueron bautizados. Este es el segundo paso que debes dar. El bautismo es el testimonio público de tu nueva fe.; Ahora crees que Cristo murió por tus pecados,
fue sepultado y al tercer día resucitó. (Romanos 6:3-5). El bautismo es el testimonio público de tu nueva vida. Estabas muerto en tus pecados y el Señor te resucitó a una
nueva vida. Es el testimonio público de tu nueva relación con Dios. Ya no es la relación Creador-criatura; ahora es la relación Padre-hijo; y el bautismo es tu señal
de que ya no eres hijo de desobediencia, sino por el contrario es el sello de tu promesa de vivir como hijo de obediencia. Como dijo Pablo “Lo que ahora vivo en
la carne, lo vivo por en la fe del Hijo de Dios, quien el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí” (Gálatas 2:20).
• Se reunían en el templo y en las casas y compartían juntos las oraciones, la alabanza a Dios, la enseñanza de la palabra o doctrina, la cena del Señor, los alimentos. Todo
esto lo hacían constantemente con alegría y sencillez.
EL MANDAMIENTO A CONGREGARSE
• El mandamiento de Dios es que no debes dejar de congregarte, sino que debes asistir fielmente a la iglesia. Al hacerlo, cuando lo haces así serás estimulado al
amor y a las buenas obras “Y considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras, no dejando de congregarnos, como algunos tienen por
costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca” (Hebreos 10:24,25). Si dejamos de congregarnos, tal como sucede con la
brasa que se separa del fuego, pronto te apagarás y te sentirás desalentado.
• Otra razón es que el día que regresará el Señor, ese día se acerca. Cuando Él venga,El levantará a Su iglesia y tú debes estar allí.
¡Te ¿Puedes imaginar el gozo que sentirás si cuando regrese el Señor, si entonces estás,Él viniera, y tú estuvieras en la iglesia adorándole y sirviéndole? Pero ¡qué triste sería si
estuvieses en otro lugar…!
VERSÍCULO PARA MEMORIZAR
“Así que, ya no sois extranjeros, ni advenedizos, sino conciudadanos de los santos y miembros de la familia de Dios” Efesios 2:19.